Traducción: Presbítero Siluan Dignac
Atenas, 5 de junio de 1974,
Protocolo Numero 1191
Virtuosísimos y Reverendísimos Ministros del Altísimo:
La gracia, misericordia y paz de Dios esté entre ustedes, y nuestra oración y bendición.
Por medio de la presente Encíclica nos dirigimos a ustedes, intentando traer a vuestro recuerdo un deber indispensable para observar vuestro curso de acción, en obediencia a lo entregado a nosotros desde antiguo por los Padres, Portadores de Dios.
Así, nosotros les ordenamos, todavía, una vez más, a limitar vuestro ministerio solo para los miembros de nuestra Iglesia, para que ustedes no sean piedra de tropiezo para los hermanos, como uno de aquellos que no creen en esto que profesamos, atrayendo ustedes para si la crítica de gente ordinaria .
La celebración de un Misterio y la administración de la Santa Comunión a los nuevos calendaristas esta prohibido desde aquel tiempo en que comenzó el cisma creado por la Iglesia Estatal. Por consiguiente, es necesario que ustedes mantengan esta posición sin ninguna desviación, en obediencia para la comprensión de todo aquello que nos fue dejado en herencia en la Iglesia. Cualquiera del nuevo calendario que desee estar en nuestras filas debe y es completamente necesario hacer una confesión de Fe en respeto a todo lo que nos fue transmitido por nuestros Padres Portadores de Dios, deben renunciar y condenar cada una de las herejía e innovaciones que hayan entrado por motivo del nuevo calendario en la iglesia griega, la cual ha sido cismática desde la aceptación de este calendario en 1924 hasta el presente, de acuerdo a la misma confesión del innovador, Arzobispo Chrysostomos Papadopoulos, y, en consecuencia, sus misterios están privados de santificación de la gracia.
También, con respecto a aquéllos que han sido bautizados en la Iglesia mencionada y no han vuelto a la piedad, es necesario que, según el Primer Canon de San Basilio el Grande, ellos sean re-crismados con el Santo Crisma de procedencia canónica.
Como consecuencia de lo anterior, nosotros ordenamos que, en conformidad con los Santos y Sagrados Canones, ustedes, de ahora en adelante de ningún modo deben administrar sacramentos a nadie que venga del la Iglesia de Nuevo Calendario, a menos que se lleva a cabo primero el procedimiento anteriormente dicho, puesto que, de lo contrario, se impondrán las sanciones predeterminadas por los Sagrados Cánones a aquéllos que lo transgredan esto.
Presidente del Sínodo Santo
† Arzobispo Auxentios
El Sagrado Sínodo de la Genuina Iglesia Ortodoxa de Grecia
† Akakios de Diavlia y Attica
† Gerontios de Pireo y Salamina
† Paisios de Euripus y Euboea
† Chrysostomos de Thessalonica
† Kallinikos de Fthiotidos y Thavmakos
† Akakios de Canadá
† Gabriel de las Islas Cyclades
† Antonios de Megaris
